En el 2012, Charlotte Figi, niña de tan solo 6 años, le dio el nombre a la telaraña de Charlotte. Esta niña tenía el Síndrome de Dravet y sufría aproximadamente 300 convulsiones semanales a causa de la epilepsia, la cual era resistente a los medicamentos que consumía.
La telaraña de Charlotte es la españolización de “Charlotte´s Web”, una empresa estadounidense con sede en Colorado fundada por los hermanos Stanley. Estos siete increíbles jóvenes que, inicialmente, no se propusieron crear una empresa, sino, cumplir una misión y, más adelante, cumplir una promesa.
Paige y Matt, padres de Charlotte, después de agotar todas las posibilidades médicas, tanto tradicionales como no tradicionales, no lograban ayudar a aliviar el sufrimiento de su hija, por lo que recurrieron a los hermanos Stanley para probar algo para muchos bastante controvertido, pero que conforme iban realizando el tratamiento, resultó más que inspirador.
Los hermanos Stanley, junto a los padres de la niña, Paige y Matt, hicieron que Charlotte probará Cannabidiol (CBD), lo que ahora es conocido como aceite de CBD, el compuesto no psicoactivo que se encuentra en todas las plantas de Cannabis.
Como sabemos, todas las plantas de cannabis contienen distintas cantidades de CBD y de THC, pero al referirnos a cannabis medicinal hablamos de aquellas plantas cultivadas que solo contienen el 0.3% o menos de THC y el resto es CBD, a esto se le denomina cáñamo y es legal en la mayoría de casos.
Después de empezar el tratamiento con el aceite de CBD las convulsiones de Charlotte se redujeron, a solo una semana de usarlo únicamente tuvo 1 convulsión y comenzó a experimentar una calidad de vida que nunca antes había tenido, la vida de una niña sana. Si bien, no se curó del Síndrome de Dravet, Charlotte y su testimonio hicieron posible que más niños como ella pudieran experimentar la vida como se debe vivir: con asombro y amor. La historia de Charlotte ayudó a respaldar la legislación estadounidense sobre el cannabis medicinal y por ello se le llamo Charlotte´s Web (la telaraña de Charlotte).
La pequeña Charlotte falleció el 8 de abril del 2020 producto del Covid19, a los 13 años, su deceso se produjo debido a complicaciones por neumonía. Su mamá, Paige Figi, colocó en Facebook lo siguiente “Charlotte ya no sufre. Ella está libre de ataques para siempre. Muchas gracias por todo su amor, respetemos la privacidad de la familia en este momento». Su padre también se pronunció en la red social señalando lo siguiente, “La mayoría de la casa se recuperó bien después de un mes de virus, pero nuestra pequeña Charlotte no mejoró. Tuvo un par de días en los que parecía haber dado vuelta a la página, pero luego decayó. Usamos todos nuestros trucos los últimos días, pero nada funcionó. El personal aquí es increíble y fue reconfortante ver algunas caras amistosas de mi pasado (…) Por favor, manténganla en sus pensamientos y oraciones”.
El día de su fallecimiento, las condolencias inundaron la página de Facebook de Paige Figi y el sitio web de Charlotte, donde, los hermanos Stanley colocaron: “Ella era una luz que iluminaba el mundo. Era una niña que nos llevó a todos sobre sus pequeños hombros”.