Hay investigaciones que sugieren que es probable que el consumo de cannabis preceda al consumo de otras drogas legales o ilegales y la adicción a otras drogas, por ejemplo, un estudio que utilizó datos longitudinales del National Epidemiological Study Of Alcohol Use and Related Disorders (Estudio epidemiológico nacional del consumo de alcohol y trastornos relacionados) halló que los adultos que reportaron el consumo de cannabis durante la primera etapa de la encuesta tuvieron más probabilidades de contraer un trastorno por consumo de alcohol en un plazo de tres años que los adultos que no consumieron cannabis, del mismo modo, las personas que consumieron cannabis y ya tenían un trastorno por consumo de alcohol, tuvieron un mayor riesgo de que su trastorno por consumo de alcohol empeore.